Cuando navegas por Internet
Aunque introduzcas tus datos personales en una web
sigues teniendo poder sobre ellos. Es interesante que sepas que:
- Si los datos que cediste ya no son necesarios para lo que te los
pidieron o no se trataron como deberían, puedes pedir que los
eliminen.
- Tienen que explicarte las cláusulas de la política de
protección de datos en un lenguaje claro y comprensible que
evite las malas interpretaciones.
- Si quieres, puedes pedir una
copia de tus datos y trasladarlos a otro proveedor de servicios.
Cuando administras una web
Como persona administradora de una web tienes que informar a tus visitantes de lo que ocurre con
sus datos, por ejemplo, cuando rellenan un formulario o aceptan
la política de cookies. El nuevo reglamento explica que:
- La persona usuaria de tu web tiene que darte una autorización
explícita para el tratamiento de sus datos.
- Tienes que
explicarle cuánto tiempo vas a conservar sus datos y que puede
llevarlos a otro proveedor de servicios cuando quiera.
- Si
hubiese algún problema con la seguridad de los datos personales
que manejas, tendrías que informar a la AEPD lo más pronto
posible.
- Si trabajas con un gran volumen de datos personales,
tienes que designar a alguien que te asesore (DPD, delegado de protección de datos).
Si tienes alguna duda, puedes acceder al reglamento completo aquí.